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Mantener limpia nuestra refrigeradora permite mantener un buen nivel de higiene alimentaria en el hogar, evitando una potencial intoxicación por alimentos. Un reciente estudio demostró que dejar sin mantenimiento este electrodoméstico puede llegar a niveles impensados.

Los expertos de High Speed Training tomaron muestras de diferentes áreas de refrigeradores y hallaron que los de casa estaban hasta tres veces más sucios que el asiento de un inodoro. La puerta del frigorífico resultó ser la más sucia en general, presentando los niveles más altos de bacterias.

La experta en higiene alimentaria Natasha Blythe señaló que esto puede deberse a que la puerta suele ser la parte más caliente de la refrigeradora, contribuyendo a que las bacterias crezcan y volviendola un espacio de cultivo perfecto para los gérmenes.

Otro factor que contribuye a la aparición de bacterias es el almacenamiento inorrecto de alimentos. Blythe precisó que la puerta debe usarse para guardar comidas que no se malogren rápidamente, tales como jugos, cremas de comida y frascos o botellas de conservas.

Además, la especialista precisa que productos como la leche deben conservarse en la parte trasera del electrodoméstico. Para evitar complicarse con la limpieza, se debe realizar cuando el refrigerador esté casi vacío, antes de realizar una importante compra en el supermercado.

VACÍA LA REFRIGERADORA

Es fundamental que los alimentos que saques del refrigerador los mantengas frescos. Asimismo, es oportuno revisar productos que ya caducaron y que pasamos por alto, pues pueden traer bacterias dañinas que afecten a los insumos frescos.

RETIRA ESTANTES Y CAJONES

Blythe resalta que la clave para limpiar profundamente el frigorífico es quitar todos sus compartimentos, como estantes y cajones, los cuales deben lavarse con agua caliente y jabón. Una vez estén completamente limpios, debes dejarlos secar al aire libre.

LIMPIA EL INTERIOR Y EXTERIOR

Para limpiar el interior del refrigerador, recomienda usar una solución de agua y jabón, pues los productos químicos pueden permanecer en el aparato y contaminar los alimentos al momento de reponerlos. Tras esto, es importante secar las superficies para eliminar el exceso de humedad.

La parte que más entra en contacto con nuestras manos es el exterior de la refrigeradora, por lo que puede ser otro punto de acceso a gérmenes. Aquí también se debe aplicar una solución de agua caliente y jabón, prestando atención a los puntos de mayor contacto.

Para este estudio, High Speed ​​Training tomó muestras de cinco asientos de inodoro e igual cantidad de estantes de refrigeradores, cajones de verduras de refrigeradores y estantes de puertas de refrigeradores. En total, se usaron cinco frigoríficos diferentes y cinco asientos de inodoro diferentes.