Especialistas advierten que la gripe aviar es una amenaza constante que podría desencadenar la próxima pandemia si se subestima.
Tras la terrible época que vivimos durante la pandemia por la COVID-19, la comunidad científica y los gobiernos en todo el mundo mantienen una vigilancia constante en busca de amenazas que puedan desencadenar una nueva crisis sanitaria global.
En este contexto, la atención se ha centrado en un antiguo conocido: el virus de la gripe aviar. La persistencia del peor brote de gripe aviar registrado hasta la fecha, que ha ocasionado la muerte de cientos de millones de aves y generado infecciones preocupantes en mamíferos desde 2021, ha encendido las alarmas ante la posibilidad de que este patógeno mute y se adapte a los seres humanos.
Daniel López Acuña, exdirector de Acción Sanitaria en Crisis de la Organización Mundial de la Salud (OMS), advirtió que la gripe aviar es una amenaza constante, una «espada de Damocles» que podría desencadenar la próxima pandemia si se subestima. En este contexto, la Agencia Europea del Medicamento (EMA) ha dado un paso crucial al aprobar, el 22 de febrero, una vacuna prepandémica destinada a hacer frente a una eventual crisis por gripe aviar.
La vacuna, denominada Celldemic, se basa en una cepa de gripe aviar que circuló entre pavos en 2005 y ha demostrado provocar una respuesta inmunitaria efectiva contra la variante actual del virus. Según Inmaculada Casas, responsable del laboratorio de virus respiratorios y gripe del Centro Nacional de Microbiología (CNM), esta vacuna utiliza dos proteínas de la superficie del virus, hemaglutinina y neuraminidasa, para estimular la respuesta del sistema inmunitario.
Por otro lado, Raúl Ortiz de Lejarazu, director emérito del Centro Nacional de Gripe de Valladolid, destaca la importancia de tener estas vacunas ya aprobadas, lo que permitirá una respuesta casi inmediata ante una eventual pandemia. Además, resalta la novedosa técnica de producción de las vacunas, que utiliza el cultivo del virus en células en lugar de huevos, proporcionando ventajas técnicas y logísticas significativas.
Otra vacuna, llamada Incellipan, ha sido aprobada por la EMA y está destinada a usarse únicamente en caso de que se declare oficialmente una pandemia de gripe. En este caso, la aprobación se centra en el sistema o plataforma de fabricación, ya que las subunidades del virus causante de una futura pandemia aún no se conocen.
Ambas vacunas, desarrolladas por la farmacéutica CSL Seqirus, representan un cambio sustancial en el enfoque de producción al utilizar el cultivo de virus en células en lugar de huevos. Esta innovación elimina los desafíos logísticos y de riesgo asociados con la producción en huevos, ofreciendo flexibilidad, escalabilidad y rapidez en la respuesta a una potencial crisis de gripe aviar.
Los expertos resaltan que estas vacunas, administradas en dos dosis separadas por tres semanas, están indicadas para adultos y niños mayores de seis meses. A pesar de los efectos secundarios comunes como dolor local en la zona de la inyección, fatiga y dolor de cabeza, la aprobación de estas vacunas prepandémicas representa un avance significativo en la preparación para hacer frente a posibles amenazas de pandemias futuras.
Te puede interesar:
También te puede interesar