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Dos hombres armados que usaban máscaras entraron a una escuela primaria brasileña el miércoles y mataron a tiros a al menos seis niños que estaban tomando sus meriendas, así como a dos funcionarios escolares, antes de suicidarse, dijo la policía de Sao Paulo, en un incidente que dejó diez muertos.

Los hombres, que parecían tener entre 20 y 25 años de edad, dispararon y mataron a un trabajador en un autolavado cercano antes del ataque en la escuela Raul Brasil, agregaron las autoridades. Al centro, ubicado en el municipio de Suzano, asisten más de 1.000 menores de entre 11 y 15 años.

La policía dijo que los atacantes, que no creen fueran exalumnos, llegaron al complejo y empezaron a disparar cerca de las 9.30 hora local (1230 GMT). Otras 17 personas, en su mayoría alumnos de la escuela, fueron baleadas y heridas, y varias de ellas estaban graves, afirmó la policía, que aún no manejaba ni los motivos ni las identidades de los atacantes.

Marcelo Salles, comandante de las fuerzas policiales en Sao Paulo, habló en las afueras de la escuela y declaró que en sus más de tres décadas de servicio, «nunca había visto algo como esto, fue un crimen indescriptiblemente brutal».

Salles dijo que los hombres armados usaron al menos una pistola calibre .38, bombas caseras y una ballesta. La policía llegó ocho minutos después del inicio del tiroteo y no se enfrentó a los hombres, que ya se habían suicidado, dijo. Un video casero tomado durante el tiroteo y transmitido por Globo TV mostró a los niños gritando y corriendo mientras se escuchaban los disparos.

Cámaras de seguridad de las casas cercanas a la escuela mostraron a los menores escalando y saltando por encima de la muralla blanca que rodea el centro educacional y corriendo por las calles, gritando por ayuda. Se registró otro tiroteo a unos 500 metros poco antes de los incidentes en la escuela Raul Brasil pero no estaba claro aún si ambos hechos estaban relacionados.

Los incidentes con armas en las escuelas no son comunes en Brasil, pese a que el país ostenta la cifra más alta de homicidios anuales del mundo. El último ataque registrado con armas de fuego en una escuela fue en 2011, cuando murieron 12 menores a manos de un exalumno en Río de Janeiro.

Si bien las leyes de control de armas son muy estrictas en Brasil no es difícil comprar una pistola de forma ilegal.