Al menos 150 personas fallecieron por la caída de lluvias torrenciales en varias regiones del sudoeste de Japón. De acuerdo con las autoridades, las víctimas perdieron la vida tras ser arrastradas por los ríos o por los derrumbes de edificios.
Los fuertes aguaceros comenzaron el pasado jueves y causaron graves daños en miles de viviendas e infraestructura pública. 30 mil habitantes fueron evacuados hacia refugios en zonas más seguras.
La lluvia obligó a la suspensión de líneas ferroviarias, cierre de carácter y caída de los servicios de luz eléctrica y telefonía. Ha sido señalada como una de las peores catástrofes en Japón en los últimos años.
Un total de 73 mil efectivos de las fuerzas de autodefensa, policías y bomberos continúan con las operaciones de búsqueda de desaparecidos y rescate de personas atrapadas en inmuebles.
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El pequeño de cinco meses sobrevivió tras ser enterrado vivo, boca abajo y con una sola prenda en un bosque cuando la temperatura era de 7,8 grados Celsius.https://t.co/XyUSQ8P4ER
— Latina Noticias (@Latina_Noticias) July 10, 2018
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