La UE impuso sanciones a Mordashov y a muchos otros magnates rusos como castigo a Moscú por su invasión de Ucrania.
MOSCÚ, 2 mar (Reuters) – El productor siderúrgico ruso Severstal ha suspendido las exportaciones de acero a la Unión Europea, según informó el miércoles, después de que su principal accionista, Alexey Mordashov, fuera sancionado por la UE a principios de esta semana.
Severstal, que produjo 11,6 millones de toneladas de acero en 2021, compite en Rusia con NLMK y Evraz , entre otros. Severstal suele exportar el 40% de su producción anual, de la que 3 millones de toneladas van a Europa.
«Debido a algunos problemas en el trato con los clientes europeos, Severstal está reorientando los flujos de mercancías hacia mercados globales alternativos», dijo Severstal en un comunicado.
El grupo afirmó que su posición financiera sigue siendo sólida y que los bajos costes de producción le ayudarán a mantener la capacidad de producción.
La UE impuso sanciones a Mordashov y a muchos otros magnates rusos como castigo a Moscú por su invasión de Ucrania. Rusia califica sus acciones en Ucrania de «operación especial».
Mordashov, un conocido empresario ruso que también es el mayor accionista individual del grupo de viajes alemán TUI , dijo en un comunicado el lunes que «lo que está sucediendo en Ucrania es una tragedia para dos naciones fraternas».
«Es terrible que mueran ucranianos y rusos, que la gente sufra penurias y que la economía se hunda. Espero sinceramente que en un futuro muy cercano se pueda encontrar una forma de resolver este conflicto y detener el derramamiento de sangre», dijo.
Mordashov añadió que nunca ha mantenido una postura próxima a la política y que no tiene nada que ver con la crisis actual.
«No entiendo cómo estas sanciones contra mí van a contribuir a la solución del terrible conflicto en Ucrania», dijo.
Las exportaciones de Severstal a la UE empezaron a caer antes de que se impusieran las sanciones a Mordashov, ya que los clientes se abstuvieron de hacer nuevos contratos, según dijo a Reuters una fuente cercana.
«Muchos (clientes) tienen miedo de la presión pública y no saben qué hacer. Cualquier empresa rusa es ahora un ‘punto negro'», añadió la fuente.
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