Una madre agarró a golpes a su hijo de dos años porque no quería comerse un hot dog. La gravedad de las lesiones terminó ocasionando la muerte del pequeño. El hecho sucedió en Kansas, en Estados Unidos, en mayo del 2018.
La mujer, identificada como Elizabeth Woolheater, contó que golpeó al niño porque no quiso comerse el embutido. Agregó que su novio Lucas Diel le pidió que lo agrediera más fuerte.
Tras la golpiza, el niño fue llevado a un hospital, donde se determinó su estado crítico. Finalmente, murió el 6 de mayo del 2018. La autopsia mostró que tenía varios huesos rotos, inflamación en el cerebro y rasgos de desnutrición.
Tras poco más de un año de proceso, Woolheater fue condenada a 19 años y cinco meses de cárcel el pasado 5 de octubre. Su pareja negó haber golpeado al niño, pero fue sentenciado por asesinato en segundo grado.
El Departamento para Niños y Familia registró alertas respecto a los abusos de los que el niño era víctima. Las autoridades investigaron el caso, pero el fiscal de distrito no consiguió reunir pruebas para la acusación..
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