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La peligrosa ola de frío ártico que provoca bajas temperaturas e intensas neblinas forzó el cierre de escuelas, oficinas y negocios en múltiples estados que ya se han declarado en emergencia.

 

El Servicio Meteorológico Nacional prevé que el frío extremo llegaría hasta los menos 51 grados centígrados y la gente podría congelarse en cuestión de minutos. Razón por la cual pidieron a los millones de habitantes a permanecer en sus casas.

 

Según los expertos las corrientes del aire ártico que habitualmente circulan en el Polo Norte se movilizan ahora hacia el territorio norteamericano debido al calentamiento global. Se pronostica que lo peor está por venir con temperaturas gélidas que no se han registrado en más de un cuarto de siglo.

 

 

OLA DE FRÍO EN EUROPA

 

Los residentes de la capital griega, Atenas, se despertaron el martes con la insólita imagen de una ciudad nevada mientras el país se estremece bajo una ola de frío que ha situado las temperaturas por debajo de cero grados en varias regiones.

 

 

La colina de la Acrópolis, los monumentos nacionales y los sitios arqueológicos en Atenas quedaron cubiertos por una ligera capa de nieve y se cerraron escuelas en la región de Ática, que engloba a la capital.

 

En algunos suburbios del norte la capa de hielo hacía que las carreteras fueran inaccesibles, y las autoridades sacaron vehículos quitanieves para mantener el tráfico abierto. La nieve también ha interrumpido algunos servicios ferroviarios y de autobuses.

 

Los meteorólogos griegos han denominado «Telemachos» a este fenómeno, que ha rebajado las temperaturas a un mínimo de -20,9 grados Celsius en la región de Drama en el norte del país el martes por la mañana, según fuente de Reuters.