Durante los enfrentamientos entre los manifestantes y los policías para evitar la toma de aeropuerto, diez personas resultaron heridas.
En el marco de las protestas contra el Ejecutivo y el Congreso, manifestantes en Puno intentaron tomar a la fuerza el aeropuerto de Juliaca. Muchos de ellos se enfrentaron a las autoridades para lograr su cometido.
Derribaron las rejas para ingresar al aeropuerto Internacional Manco Capac en la ciudad de Juliaca. Los ciudadanos rodearon el establecimiento y quemaron llantas para bloquear los accesos, mientras arrojaban piedras.
Las autoridades fueron atacados con piedras cuando intentaban detener a los manifestantes. La policía hizo uso de bombas lacrimógenas para dispersar a la muchedumbre. Diez personas terminaron lesionadas.
Alrededor de las 11.00 de la mañana, Aeropuertos Andinos del Perú dispuso suspender las operaciones en dicho aeropuerto, raíz de la inseguridad que generan los levantamientos.
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