Carlos Marina indicó que allegados a Magaly Ruíz, a quien denunció por presunto recorte de sueldo, estarían impidiendo que él postule a algún puesto en el Parlamento.
El extrabajador de la congresista Magaly Ruíz, Carlos Marina, quien acusó a la parlamentaria de Alianza por el Progreso (APP) por presunto recorte del sueldo, reveló que le están impidiendo conseguir trabajo en el Congreso de la República. Se trataría de una represalia por la denuncia que hizo y que fue revelada por el programa Punto Final.
“Ante mis intentos de poder postular a un despacho o área del Congreso de la República, me he encontrado con información de asesores del Congreso que me manifiestan que personas allegadas a la congresista Magaly Ruíz han sugerido no aceptar mi contratación ni mucho menos siquiera llegar a la fase de entrevista laboral. Es decir, nos están cerrando las puertas completamente pese a la experiencia y conocimientos que tenemos del manejo parlamentario”, declaró Marina en diálogo con Latina Noticias.
También indicó que, tras la denuncia en Punto Final, el asesor Johnny Romero hizo público un diagnóstico médico suyo durante una entrevista en un medio de comunicación, por lo que lo ha denunciado. “Esto afectó a mi persona, mi familia y mi círculo más cercano. Ya he tomado medidas legales contra esa persona”, dijo.
Carlos Marina también fue consultado sobre cómo se sintió luego de que la Comisión de Ética sancionara a Magaly Ruíz solamente con 30 días de descuento de su remuneración y con una amonestación pública escrita. El extrabajador parlamentario señaló que se sintió indignado.
“En un principio, sentí impotencia de ver cómo mi institución simplemente daba la espalda a un extrabajador, pese a las evidencias, pese a las declaraciones de la misma congresista, pese a la aparición de nuevos testigos que corroboraban toda mi denuncia», expresó.
«Es más, el informe de calificación avalaba toda la denuncia que yo estaba realizando. Es decir, se corroborará todo lo que yo estaba señalando en mi denuncia y que pase eso fue un baldazo de agua fría, que evidentemente es vergonzoso. Y, sobre todo, es un claro ejemplo de amedrentamiento contra otras personas que probablemente tienen más casos. Evidentemente, ellos no van a hacer públicas sus denuncias, porque se está haciendo un blindaje rochoso a nivel del fuero político», culminó.
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