Este proyecto ha despertado críticas debido a la escasa infraestructura de producción y la falta de camales especializados para burros en Perú.
El anuncio reciente sobre la posibilidad de exportar carne de burro desde Perú hacia China ha generado un intenso debate entre funcionarios del gobierno. La Ministra de Comercio Exterior, Elizabeth Galdo, provocó controversia al adelantar la propuesta antes de la visita oficial a China, mencionando la existencia de mercados potenciales, mientras que desde el Ministerio de Agricultura se minimizó la viabilidad de este negocio, considerándolo de interés limitado para el país.
Este proyecto ha despertado críticas y dudas debido a la escasa infraestructura de producción y la falta de camales especializados para burros en Perú, que contrasta con los elevados estándares sanitarios exigidos por China para cualquier exportación. A pesar de las expectativas iniciales, aún no se cuenta con un respaldo concreto ni estudios oficiales que sustenten la viabilidad comercial de esta propuesta, lo que ha llevado a cuestionamientos tanto dentro como fuera del gobierno.
El tema ha tomado relevancia y se cuestiona la prioridad dada por el gobierno peruano a este tipo de exportación frente a otros sectores más consolidados como el de la carne de res.
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