Stephen Curry lideró a los Warriors con 34 puntos, siete asistencias y siete rebotes para conseguir su cuarto título y su primer premio de MVP de las Finales.
17 jun (Reuters) – Los Golden State Warriors consolidaron su lugar como una de las grandes dinastías de la NBA con la victoria del jueves en el sexto partido por 103-90 sobre los Boston Celtics, sellando su cuarto campeonato en ocho temporadas.
La victoria por 4-2 en la serie de las Finales permitió a los Warriors conseguir su séptimo campeonato, rompiendo el empate con los Chicago Bulls por el tercer puesto en la lista de ganadores de todos los tiempos, por detrás de los Celtics y Los Ángeles Lakers, ambos con 17 títulos.
Los Warriors son también el primer equipo que gana cuatro campeonatos en un periodo de ocho años desde que los Bulls ganaron seis de 1991 a 1998.
Stephen Curry lideró a los Warriors con 34 puntos, siete asistencias y siete rebotes para conseguir su cuarto título y su primer premio de MVP, o mejor jugador, de las Finales.
«Estoy muy orgulloso de nuestro grupo», dijo un emocionado Curry tras la victoria, y añadió: «al principio de la temporada nadie pensaba que estaríamos aquí, excepto todos los que están en esta cancha».
El triunfo supone un notable giro para los Warriors, que se perdieron los «playoffs» en las dos últimas temporadas en medio de un torrente de lesiones antes de derrotar este año a los Nuggets, Grizzlies, Mavericks y Celtics para hacerse con el trofeo Larry O’Brien.
«Estábamos muy lejos», dijo Curry.
«Tocamos fondo con las lesiones y el largo camino de trabajo que tenemos por delante y el intento de completar las piezas y los chicos adecuados. Nunca puedes dar nada por sentado porque nunca sabes cuándo vas a volver aquí».
Los Warriors parecían estar en problemas al principio de las Finales, ya que su mala puntería les hizo ir perdiendo por 2-1 en la serie al mejor de siete, pero tomaron el mando apretando en las labores sin balón.
«Lo que hizo que este equipo superara el obstáculo fue nuestra defensa», dijo el entrenador Steve Kerr.
Es el séptimo título en total para la franquicia de los Warriors, que se fundó en Filadelfia en 1946 como uno de los miembros originales de la Asociación de Baloncesto de Estados Unidos.
Los Warriors también consiguieron el primer campeonato de la liga en la temporada 46-47.
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