Especialistas explican algunas de las acciones que pueden ponerse en marcha para hacerle cara a las consecuencias a estos fenómenos naturales.
En los últimos meses, el Perú se ha visto afectados por dos acontecimientos naturales: Niño Costero y Niño Global. El comportamiento de ambas llega a influir con gran impacto a diferentes regiones del país.
Por esta razón, medir ambos fenómenos ayuda a comprender las acciones que deben ponerse en marcha para reducir, así como aliviar, las consecuencias que estas puedan tener en las personas.
Para conocer más sobre el tema en cuestión, Latina Noticias conversó con José Martínez, jefe de monitoreo de Rímac, y Cinthya Arteta, subgerente de ingeniería y prevención.
Según detalla Cinthya Arteta, las lluvias «sobre lo normal» del norte y las sequía de la zona sur, respectivamente, pueden traer consecuencias, como la afectación en la agricultura e impacto en temas de saneamiento.
No obstante, para la especialista, existen algunas prácticas que pueden aplicarse para defenderse de ellas, como el cuidado del techo, la revisión del sistema de drenaje, liberación del alcantarillado, entre otros.
Para Martínez, un centro de monitoreo en el país es importante no solo para evaluar el comportamiento de los fenómenos naturales, sino también estudiar el potencial de impacto hacia la población en general.
Como parte de su explicación, el jefe de monitoreo de Rímac señaló que en la parte norte del país, el Niño Costero provocará lluvias en la región Piura y Tumbes, mientras que el Niño Global dejará sequías en la zona sur.
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