Donald Trump exige que se retire una pintura «distorsionada a propósito»

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha solicitado la retirada de su retrato exhibido en el Capitolio del Estado de Colorado, calificándolo de «deliberadamente distorsionado». La pintura, obra de la artista Sarah Boardman, ha generado un intenso debate sobre la representación artística y la política en el ámbito público.

La controversia se desató cuando Donald Trump expresó su descontento a través de su plataforma en redes sociales, Truth Social, donde criticó duramente la obra y solicitó su eliminación inmediata. Según el presidente, numerosos residentes de Colorado han manifestado su desagrado por la representación, considerándola una falta de respeto hacia su figura. Además, comparó desfavorablemente su retrato con el del expresidente Barack Obama, también pintado por Boardman, al que describió como «maravilloso».

«A nadie le gusta una mala foto o pintura de sí mismo, pero la de Colorado, en el Capitolio Estatal, colocada por el gobernador, junto con todos los demás presidentes, fue distorsionada a propósito hasta un nivel que quizás ni siquiera yo haya visto antes. El artista también pintó al presidente Obama y ​​se ve maravilloso, pero la mía es realmente la peor. Debió haber perdido su talento con la edad», escribió Donald Trump en Truth Social.

La artista Sarah Boardman, reconocida por sus retratos presidenciales, incluyendo los de Obama y George W. Bush, defendió su trabajo afirmando que su intención siempre ha sido presentar a sus sujetos de manera neutral y objetiva. Boardman enfatizó que sus opiniones políticas no influyen en su arte y que busca capturar la esencia de cada individuo sin prejuicios.

El retrato de Donald Trump fue inaugurado en agosto de 2019 como parte de un proyecto iniciado por funcionarios estatales republicanos para honrar a los presidentes de Estados Unidos. La obra fue financiada mediante donaciones privadas, recaudando cerca de 11,000 dólares para su creación.

En respuesta a las críticas de Donald Trump, el gobernador de Colorado, Jared Polis, expresó sorpresa por el interés del expresidente en el arte del Capitolio estatal. Un portavoz de Polis destacó la importancia histórica del edificio y sus obras, señalando que la decisión sobre la exhibición de retratos recae en la legislatura estatal.

Tras la solicitud de Donald Trump y la creciente polémica, se confirmó que el retrato será retirado del Capitolio. Los líderes republicanos en la legislatura estatal solicitaron su remoción, y el personal legislativo se encargará de trasladar la pintura al History Colorado Center para su almacenamiento.

Este incidente ha reavivado el debate sobre la representación artística de figuras políticas y la subjetividad inherente al arte. Mientras algunos consideran que el retrato es una interpretación válida dentro de la libertad artística, otros lo ven como una representación inapropiada que no honra adecuadamente al presidente.​

La situación también pone de manifiesto la tensión entre la política y el arte en espacios públicos, cuestionando quién decide qué obras se exhiben y cómo se representan a las figuras históricas. Este caso podría sentar un precedente sobre cómo se manejan las controversias relacionadas con el arte y la política.​

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