Biden ha intensificado los ataques contra las empresas petroleras, cuando los precios de la gasolina en EE. UU. alcanzaron máximos históricos por encima de los 5 dólares por galón.
Veinte países se unieron al anfitrión para la presentación ceremonial del plan, aunque otros se mantuvieron al margen.
El presidente brasileño dijo que su gobierno está trabajando para proteger la selva tropical y que no necesita la región amazónica para expandir el sector agrícola del país.
La ausencia de los mandatarios de México, Guatemala, Honduras y El Salvador ha suscitado dudas sobre la eficacia de los compromisos propuestos.
Los dos presidentes se reunieron en la Cumbre de las Américas en curso en Los Ángeles en lo que se esperaba que fuera una reunión "incómoda".
El plan de Joe Biden se centrará inicialmente en los países que ya tienen acuerdos comerciales con Estados Unidos.
Biden también adelantó una declaración de la cumbre sobre migración prevista para el viernes, calificándola de "nuevo enfoque innovador e integrado" con responsabilidad compartida en todo el hemisferio.
Funcionarios estadounidenses esperan que la Cumbre de las Américas y una reunión paralela de altos ejecutivos empresariales allanen el camino para una mayor cooperación económica en la región.
Biden es el anfitrión de la cumbre esta semana, en un esfuerzo por reafirmar la posición de EE. UU. sobre la creciente influencia de China en la región.
Salvo México, el principal socio comercial de Washington, China ha superado a Estados Unidos en la región y extendió la brecha el año pasado.