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La Policía Nacional conectó un duro golpe al narcotráfico en el país luego de que efectivos destruyeran una pista aérea clandestina de 750 metros de longitud, desde donde se trasladaba droga al extranjero en la zona de Codo del Pozuzo, en Huánuco.

Hasta la zona llegó el ministro del Interior, Vicente Romero, quien precisó que ya se han destruido 18 pistas clandestinas y que, una vez se concluya la labor en este punto, se trasladarán a otro en donde ya se identificaron 60 otras vías.

El operativo se denomina Troya 2023 y apunta a enfrentar a las organizaciones criminales dedicadas al narcotráfico. Luego de la acción policial, la pista de aterrizaje quedó inservible, apuntando a repetir el éxito del proceso en otros puntos críticos.

El ministro detalló que las avionetas que llegan provenientes desde Bolivia parten de la selva y otros lugares conexos, para luego trasladar la droga hacia países de la región como Paraguay, Argentina, Uruguay y Brasil, entre otros.

«En este momento, la cifra fluctúa en la zona de Atalaya, el propio Vraem, a un promedio de 25 a 30 vuelos diarios que están saliendo. Principalmente lo que sale es PBC, los centros de refinamiento están en Bolivia. Una avioneta Cessna está entre los 250 a 300 kilos de droga», precisó.

CAPTAN PILOTOS JÓVENES

El ministro Romero apuntó que las organizaciones criminales suelen captar a jóvenes para pilotar los vuelos. El precio por cada trayecto es de 10 mil a 15 mil dólares. En tanto, el kilo de cocaína en el Vraem, fluctúa entre los 900 y 1.200 dólares.

Luego de este operativo, el ministro y efectivos de la Dirección Antidrogas (Dirandro) partieron de la zona dejando un contingente de vigilancia para evitar que sea restablecida y de nuevo lleguen avionetas procedentes de Bolivia para fines ilícitos.