Caso ‘Chapafirmas’: Congresista Darwin Espinoza obliga a trabajadores de su despacho a recoger firmas para su nuevo partido

Por Unidad de Investigación de Latina Noticias | @PuntoFinalOf

El congresista de la República y vocero de Acción Popular, Darwin Espinoza, más conocido como uno de los investigados por el caso ‘Los Niños’, solicitó en enero pasado 10.000 hojas bond a la Oficina de Abastecimiento del Poder Legislativo, con el fin de imprimir fichas de afiliación y así cumplir su sueño: inscribir su partido propio Movimiento Regional Adelante Áncash.

A través del requerimiento número 2024000966, tramitado por el despacho de Espinoza Vargas, se solicitó que se haga llegar en enero pasado, 10 millares de papel bond a su oficina, cuyo personal y logística financian todos los peruanos, pero que ahora funciona como una maquinaria electoral del legislador.

De hecho, de acuerdo a la Unidad de Investigación de Latina Noticias, la oficina parlamentaria, también es utilizada como almacén de las tabletas de madera, sobre las que se apoyarán las fichas, para el recojo de firmas. Y, ¿quiénes recogen las firmas?

CASO CHAPAFIRMAS: TRABAJADORES DE DARWIN ESPINOZA SON USADOS PARA RECOGER FIRMAS

Latina Noticias conversó con extrabajadores del despacho de Darwin Espinoza, quienes relataron en reserva, la manera en que fueron utilizados para recoger firmas para el futuro partido del congresista, a cambio de mantener el puesto de trabajo.

“Nos manda solos o en grupos a las provincias de la zona sierra de la región, y cada uno gasta de su propio dinero, no solo para cubrir sus gastos personales, sino también para comprar gaseosas, galletas, palanas, cosas que tú le puedas ofrecer a la gente y puedan firmar. Ya luego comenzaron a comprar pelotas, ya que resultaba más barato”, señaló uno de los excolaboradores del despacho del congresista Espinoza.

El miércoles 3 de abril, mientras el Congreso de la República votó por otorgarle la confianza al gabinete de Gustavo Adrianzén, tres trabajadores pagados por el Parlamento, fueron registrados por la Unidad de Investigación de Latina recogiendo firmas para el movimiento Adelante Áncash en el distrito de San Luis, a cuatro horas de la provincia de Huaraz. A cambio de una firma, obsequian pelotas. Pero, ¿quiénes son y cuáles deberían ser sus funciones?

Wilfredo Valencia Sánchez es coordinador del despacho de Espinoza Vargas, mientras que Kevin Haro Rodríguez se debería desempeñar como técnico de la oficina del congresista, y por último, Héctor Camacho Aguilar es un auxiliar adscrito al despacho congresal de Darwin Espinoza. Lamentablemente, en un día laborable, los tres trabajadores fueron registrados en esa fecha recolectando firmas.

Los colaboradores del despacho de Espinoza, no solo están obligados a cubrir sus propios gastos de viaje y manutención durante los extensos días que pasan en la región Ancash. Deben también, de su bolsillo, adquirir productos que animen a la gente a firmar. Las pelotas, por ejemplo, las compran en una tienda ubicada a cinco cuadras del parlamento.

Ya en la región del congresista, se trasladan con estos artículos a diferentes provincias y distritos, a bordo de una combi de placa CEK153,que Darwin Espinoza conoce bien, ya que lo usó como medio de transporte en la semana de representación, cuando llegó a Caraz el jueves 21 de marzo. Ese día el congresista también utilizó al asesor, Franco Mora Contreras, para distribuir pelotas a cambio de firmas.

Pero si hay alguien que ha llevado la peor parte del abuso congresal, es Abel Camones Leyva, a quien se ha visto desde enero de este año, recorriendo recónditos pueblos de Ancash, en busca de las firmas que ordenaba recoger su entonces jefe. Abel Camones era auxiliar del despacho de Darwin Espinoza, y reportaba con fotos el trabajo que hacía para Adelante Ancash, en plena semana laboral en el Congreso, al que no asistía.

“Todos hemos estado viajando por 17 días, incluso el mes entero, ya que los pueblos son bien lejos, donde a veces no hay señal. El trabajo lo hacemos de lunes a viernes, incluso fines de semana, y todo en horario de trabajo”, detalla un excolaborador del despacho del congresista.

CONGRESISTA HACE USO DE LA BASE DE DATOS DEL RENIEC PARA VERIFICAR DATOS DE LOS FIRMANTES

El lunes 25 de marzo, la Unidad de Investigación de Latina registró a Elizabeth Castillo Mejía, asistente del despacho congresal Espinoza y encargada de recopilar en Lima todas las fichas llenas que trae el resto de trabajadores a la capital, llegando en un taxi al Congreso de la República con cajas llenas de planillones. ¿Por qué?

Bueno, para inscribir un movimiento político, se necesita un mínimo de 9,100 personas afiliadas a él: electores que no deben estar inscritos en otro partido, y cuyos datos deben haber sido registrados en las fichas, correctamente. Esa verificación, es la que también se viene haciendo en el mismo despacho del congresista.

Pero, ¿qué herramienta usan para acceder a corroborar los datos de los ciudadanos? Nada más y nada menos que una cedida por el Estado: la base de datos de identidades del Registro Nacional de Identificación y Estado Civil (Reniec).

Los trabajadores del despacho ingresan al sistema de Reniec, utilizando la cuenta cedida por el Congreso de la República a Darwin Espinoza. Se trata de un usuario, vinculado a su DNI, que permite consultar los datos personales de cualquiera de los 33 millones de peruanos.

Reniec ha informado a Punto Final, de manera oficial, que solo en marzo desde la cuenta de consulta de Darwin Espinoza, se han realizado, escuche bien, 1,851 consultas. Y, en lo que, de este mes, la cifra ya supera las 1,150. 

Lo que no sabe Darwin Espinoza, es que las búsquedas hechas en el sistema de Reniec quedan registradas en su archivo. Al Ministerio Público le será muy fácil cruzar las identidades consultadas desde su cuenta, con las que acredite el movimiento político del congresista, para inscribirse.

DARWIN ESPINOZA NIEGA INTENCIÓN DE FUNDAR PARTIDO, PERO PRUEBAS LO DESMIENTEN

Darwin Espinoza, como ya hemos visto, miente. Ha intentado negar en todos los idiomas, ante la prensa ancashina, su intención de fundar su propio partido, a traición de Acción Popular, el partido que lo llevó al Congreso.

Pero la realidad es otra. No solo su página en Facebook, sino los videos que sube a redes sociales, promocionan ya «Adelante Ancash», el partido que crea para sí, con los recursos públicos, de todos los peruanos.

Incluso ya se cuenta con el Certificado de Reserva de Denominación, del Movimiento Regional Adelante Áncash, que ante el Jurado Nacional de Elecciones ha tramitado Renato Espinoza Vargas, su hermano. Un emprendimiento político familiar gratis para Darwin Espinoza, pero que al país le cuesta mucho.

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