Récord pesquero: desembarque de pota crece un 150% por El Niño, según Imarpe

El fenómeno El Niño Global impacta en la pesca artesanal e industrial, las especies marinas se han trasladado al sur en busca de aguas frías. El jefe del área de Pesca Artesanal del Instituto del Mar del Perú (Imarpe), Álex Guardia Otárola, dijo que este fenómeno climatológico impulsó la producción del bonito y de la pota en lo que va del año.

«El bonito tiene una disponibilidad de 50 mil toneladas, y la flota que ha sido direccionada para el aprovechamiento de embarcaciones artesanales tiene una capacidad de unas 20 toneladas y ha pescado el 50 por ciento, es decir, alrededor de los 22 mil toneladas», dijo. Esta disponibilidad del bonito y jurel se produce cuando las aguas subtropicales se acercan a la costa y favorece el acercamiento de ambas especies.

Según Imarpe, la descarga de este recurso en las embarcaciones artesanales de redes de cerco con capacidad de bodega mayor igual a 20 metros cúbicos (m3) o hasta 32.6 m3 asciende a más de 22 mil toneladas, que representa un incremento de más de 24% durante el mismo periodo en el 2022. Dicha cantidad de desembarque representa un avance de 50.47 % de la cuota global asignada este año (43 826 toneladas).

AUMENTA LA PRODUCCIÓN DE POTA

Asimismo, la producción y distribución del calamar se vería afectada por la pesca indiscriminada. «Para este año, se ha estimado que, aproximadamente, se produzca 580 mil toneladas, y como sabe el sector, la producción se trata desde hace muchos años con la recomendación de un mayor control como está determinado en la normativa», dijo.

Al 15 de agosto de 2023, según Imarpe, la descarga del recurso como la pota supera los 490 mil toneladas, lo que representa un incremento de más de 150 % durante el mismo periodo en el 2022 y esto es debido al fenómeno El Niño, tras la llegada de las aguas cálidas a la costa peruana. Dicha cantidad de desembarque representa el 84.54 % del límite de captura establecido de 581 mil toneladas. Los lugares que tuvieron mayor desembarque fueron en Paita, Bayóvar y Pisco.

En efecto, refirió sobre la posibilidad de que esta especie se deprede vulnerando la normativa actual. «La idea es sostener una regulación adecuada y sostenida en el tiempo. Esto implica redoblar el esfuerzo en la pesca artesanal porque esta actividad es aplicada por aquellas personas que no tienen oportunidad«, señaló.

Sin embargo, en términos económicos, esta producción de pota habría generado hasta S/ 219 millones en ganancias, que representa el 8.7 % del PBI del Consumo Humano Directo (CHD) y el 5.2 % del PBI Pesca. Asimismo, esta pesquería habría generado más de 16 mil puestos de trabajo directos.

Pese a estos números, Guardia Otárola recordó que la pota no era la preferida por los peruanos hace décadas, pero que ha sido aprovechado en los últimos años.

ANCHOVETA SE ENCUENTRA EN LAS PROFUNDIDADES DEL MAR

Por su parte, Marilú Bouchon, representante del Imarpe, señaló que el fenómeno El Niño genera cambios climatológicos que afectan en la producción pesquera. «El Niño ha generado muchos cambios en las especies pelágicas, que son aquellas que están en la superficie del mar, por eso que la anchoveta se profundiza», dijo.

Explicó que, ante un evento cálido, esta especie se acerca a la costa y está disponible para la pesca; sin embargo, se profundiza si las condiciones se intensifican y luego se dirigen hacia el sur. Este comportamiento se ha observado a lo largo de este año. También habló sobre el bonito y el jurel, la misma que continúa disponible para la pesca.

«Gran parte del año, el bonito y el jurel han estado y están disponible para la pesca por el ingreso de aguas oceánicas hacia la costa. Ocurre lo mismo con los atunes y esta disponibilidad podría continuar hasta los próximos meses», señaló.

Por otro lado, los pescadores no han encontrado pejerrey pese a que esta especie vive cerca al litoral. «Cuando aparecen estas aguas cálidas, la producción disminuye», dijo. En cambio, la caballa se encuentra en aguas cálidas que provienen desde el norte. Esto genera que la disponibilidad aumente hasta para la zona de pesca del centro y sur del litoral peruano, dependiendo de la intensidad de la temperatura.