Las semillas del tomate y la tuna: ¿Aliadas o enemigas del intestino?

Por María de los Ángeles Serrano

Un tema que genera controversia: ¿Comer las semillas del tomate y la tuna puede traer problemas intestinales? Para responder a esta pregunta, Latina Noticias conversó con el nutricionista Edinson Genaro Sánchez Sánchez, especialista en nutrición clínica.

Sánchez indica que las semillas del tomate y la tuna son fuente de fibra, la cual no es digerida en su totalidad por nuestro organismo y forma parte del bolo fecal. Su consumo aumenta la consistencia de las deposiciones y mejora la salud del tracto gastrointestinal.

Cabe precisar que el consumo de fibra se ha asociado con un papel protector en enfermedades como el cáncer colorrectal. Además, las semillas del tomate y la tuna ayudan a combatir el estreñimiento y mejorar la salud intestinal en general.

Sin embargo, el especialista señaló que a un sector de la población si le sería negativo consumir estas semillas, pues las personas con diverticulitis, una enfermedad inflamatoria del intestino. Ellas deben moderar el consumo de fibra. En estos casos, se recomienda una dieta baja en fibra durante la etapa de inflamación.

«Solamente se prohíbe en personas que tengan problemas relacionados con la diverticulitis, o por ejemplo también con patologías muy específicas, sumandas a las personas que han sido operadas» Que compromete parte del intestino grueso que forma el bolo fecal», agregó.

Las semillas de la tuna son más duras y difíciles de absorber que las del tomate. Por lo tanto, las personas con diverticulitis deben tener especial cuidado con su consumo.

RECOMENDACIONES PARA INCLUIR SEMILLAS EN LA DIETA DIARIA

Además, el nutricionista Edinson Genaro Sánchez brindó las siguientes recomendaciones por si deseas implementar semillas en tu dieta:

• Consumir las pepas del tomate y la tuna con abundante agua (2.5 a 3 litros diarios).
• Introducirlas gradualmente en la dieta para evitar molestias digestivas.
• Consultar con un nutricionista en caso de dudas o problemas digestivos.

Comer las semillas del tomate y la tuna no solo es seguro, sino que también puede ser beneficioso para la salud intestinal. Solo se deben tomar precauciones en personas con diverticulitis u otras condiciones que afecten el sistema digestivo.

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