El cuadro blanquiazul lo hizo oficial a través de sus canales digitales.
Alianza Lima dio la bienvenida con los brazos abiertos a un nuevo integrante en su equipo principal: Cristian Neira. Tras superar obstáculos contractuales con Unión Comercio, Neira se encuentra ahora listo para unirse al cuadro ‘blanquiazul’, marcando así el comienzo de una emocionante nueva etapa tanto para él como para el club.
La adquisición de Neira no fue un proceso sencillo. A lo largo de la temporada, tanto el jugador de 22 años como el club mostraron un interés mutuo. Sin embargo, se encontraron con un obstáculo significativo: el contrato vigente de Neira con Unión Comercio hasta el 2026, que exigía un pago considerable de 700 mil dólares para liberarlo.
La situación planteada requería una resolución inteligente y equitativa. Alianza Lima argumentó que la demanda económica del club de Tarapoto era desproporcionada, especialmente considerando que Neira percibía el salario mínimo. Además, respaldaron su posición en un artículo de la Constitución Política del Perú que garantiza el derecho de las personas a no ser obligadas a trabajar en contra de su voluntad. Con estos argumentos sólidos, el caso fue llevado ante la Cámara de Conciliación y Resolución de Disputa de la Federación Peruana de Fútbol (FPF).
La resolución del caso fue un gran éxito tanto para Neira como para Alianza Lima. La instancia arbitral determinó que la solicitud de desvinculación presentada por Neira era procedente, lo que le permitió romper su contrato con Unión Comercio. Este fallo allanó el camino para la inscripción de Neira en los registros pertinentes de la Federación Deportiva Nacional Peruana de Fútbol, así como en otras entidades deportivas relevantes como la ADFP, Liga 1 y Liga 2.
Este desenlace positivo no solo representa una victoria para Neira y Alianza Lima, sino que también subraya la importancia de contar con mecanismos efectivos de resolución de disputas en el ámbito deportivo. La intervención de instancias como la Cámara de Conciliación y Resolución de Disputa de la FPF no solo garantiza el cumplimiento de los contratos y los derechos de los jugadores, sino que también contribuye a mantener la integridad y el orden en el deporte profesional.
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