Punto Final denuncia la precaria situación en tres escuelas del norte y sur de Lima.
A tan solo dos semanas del inicio del año escolar, aún hay colegios estatales que no han tenido el mantenimiento necesario para que niños y adolescentes pisen sus aulas. Punto Final denuncia la precaria situación de escuelas en el norte y sur de Lima que impedirían un correcto desarrollo escolar.
En la institución educativa Pedro Ruiz Gallo, ubicada en el distrito de Carabayllo, está asentado sobre un relleno sanitario, según la Defensoría del Pueblo, por lo que se recomienda su traslado. Sin embargo, la única acción por parte del Estado fue instalar módulos. A pesar de que informaron que la presencia de dichas estructuras metálicas sería momentánea, ya llevan allí más de dos años.
Madres de familia denuncian que estos espacios no tienen una correcta ventilación, lo cual perjudicaría a sus menores hijos en su aprendizaje. Además, están ubicados muy cerca de una pendiente, lo que pone en peligro a los estudiantes de la escuela.
Cabe resaltar que una parte del alumnado fue trasladado a un local provisional ubicado a 15 minutos del colegio, pero al costado de este espacio se encuentra un establo que emana un fuerte olor que invade las aulas.
Este es también el caso del colegio Antonio Raimondi, en el distrito de San Martín de Porres. Docentes y padres de familia vienen exigiendo desde hace 2 años que se tomen acciones sobre la infraestructura que está tan desgastada que podría desplomarse en cualquier momento.
Por otro lado, en el distrito de Villa María del Triunfo, la institución educativa Julio César Tello también se encuentra sumamente deteriorada. La infraestructura presentada serias rajaduras, las aulas están deterioradas e incluso hay espacios que han sido convertidos en almacenes de basura.
Un grupo de madres de familia, que también son exalumnas de la escuela, señalan que no han visto ninguna mejora desde que terminaron el colegio en el año 1982.
Frente a estas denuncias, el Ministerio de Educación ha señalado que el Estado vela por al seguridad e integridad de los estudiante y que estas escuelas no recibirán alumnado si no cuentan con las garantías necesarias.
En ese sentido, el director regional del Minedu, Marcos Tupayachi, señaló que los niños y adolescentes de las escuelas en mención serían trasladados a otras instituciones mientras se realizan las reparaciones necesarias.
Sin embargo, madres de familia señalan que ello perjudicaría a su economía familiar, ya que tendrían que añadir el transporte diario a su presupuesto mensual.
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