¿Por qué tantos muros se derrumbaron con un sismo de solo 6.1 grados? Experto responde

El reciente sismo de magnitud 6.1 en Lima ha puesto nuevamente en evidencia los riesgos de la construcción informal. El ingeniero Miguel Estrada, docente de la Universidad Nacional de Ingeniería (UNI), lamentó la pérdida de vidas por un movimiento telúrico de baja intensidad y advirtió que más del 70% de viviendas en Perú son informales y, por tanto, altamente vulnerables.
“El sismo fue relativamente pequeño y no debería haber causado muertes. El problema es la informalidad. Muchas viviendas están mal construidas, con materiales inadecuados como ladrillos pandereta en muros exteriores, y sin supervisión técnica”, afirmó.
Estrada explicó que el Reglamento Nacional de Edificaciones del Perú es uno de los más completos en Latinoamérica, pero no se cumple. “No se trata solo del diseño, también del proceso constructivo y del tipo de suelo. Si se construye sobre laderas o terrenos blandos, como en Chorrillos, La Molina o Villa María del Triunfo, el riesgo aumenta”.
CONSTRUIR INFORMAL ES MÁS CARO Y MÁS PELIGROSO
El especialista también señaló que las viviendas construidas de forma progresiva e informal terminan costando más a largo plazo y son menos seguras. “Una casa informal no solo es más cara, también es altamente vulnerable. El reforzamiento es posible, pero no siempre viable, y no garantiza que la vivienda sea antisísmica. Solo busca evitar el colapso total y salvar vidas”.
Para Estrada, la responsabilidad recae en las municipalidades, que deben evitar nuevas construcciones informales y reforzar la fiscalización. “Se necesita una reforma del sistema con programas de vivienda social que incluyan componentes técnicos, económicos, sociales y políticos”.
Finalmente, Estrada insistió en la importancia de la preparación ciudadana. “Durante un sismo, alejarse de una vivienda informal puede salvarte la vida. En una casa bien construida, hay que permanecer adentro hasta que pase el evento y luego evacuar”.
La advertencia es clara: el Perú necesita actuar con urgencia para evitar más tragedias por sismos. La solución no solo está en reforzar viviendas existentes, sino en evitar que se sigan construyendo sin criterios técnicos ni supervisión.