Esta medida que entra en vigencia de inmediato tiene además estas excepciones.
El presidente Joe Biden anunció restricciones en cuanto a la migración. Anunció que se negará la posibilidad de solicitar asilo a aquellos migrantes que hayan sido atrapados cruzando ilegalmente la frontera entre Estados Unidos y México, quienes además serían rápidamente deportados o devueltos a México. Esta medida entra en vigencia desde el martes 4 de junio.
«Aquellos que traten de venir a EE.UU. legalmente pueden hacer una cita, llegar a un punto de ingreso. Ellos todavía serán elegibles para el asilo, pero si un individuo no usa los canales regulares y decide venir sin permiso y violando la ley, se limitará su capacidad de recibir asilo de quedarse en Estados Unidos», expuso el presidente Biden.
La nueva medida entra puntualiza que los migrantes solo podrán recibir asilo si es que lo requieren a través de un procedimiento legal, descartando la posibilidad de que se le otorgue a las migrantes que cruzan la frontera de manera ilegal.
«Esto nos ayudará a recuperar el control en la frontera, restablecer el orden en el proceso. Esta medida se mantendrá vigente hasta que el número de personas que traten de ingresar legalmente esté en un nivel que nuestro sistema pueda manejar de manera efectiva» especificó el presidente Joe Biden también durante su discurso.
De esta manera, el mandatario señaló que esta medida es temporal. Ya que se activa cuando el promedio de los arrestos supera los 2500 en la semana, y se pausará cuando los arrestos sean menores de los 1500 al día.
«La frontera no es un instrumento política o arma política, es una responsabilidad compartida. Tenemos que hacer algo al respecto… Hoy estoy pasando el obstruccionismo republicano, y usando el recurso más poderoso que tengo como presidente para hacer por mi cuenta para enfrentar el problema», manifestó en torno a la oposición de esta medida por parte del partido republicano.
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