Además, el Santo Padre no dirigirá la oración del Ángelus programada para mañana, domingo 16 de febrero.
El viernes 14 de febrero, el Papa Francisco fue ingresado en el hospital Gemelli de Roma debido a una infección en las vías respiratorias, lo cual ha llevado al Vaticano a informar que requiere «reposo absoluto» para facilitar su recuperación.
Además, el Santo Padre no dirigirá la oración del Ángelus programada para mañana, domingo 16 de febrero.
«Para facilitar su recuperación, el personal médico le ha prescrito reposo absoluto, por lo que el Santo Padre no dirigirá la oración del Ángelus mañana domingo 16 de febrero, aunque ha decidido enviar el texto para su publicación», indicó este sábado la Santa Sede en un comunicado.
Durante la mañana, Francisco recibió la Sagrada Eucaristía, un momento de gran importancia espiritual, y ha estado alternando períodos de descanso con oración y lectura. El comunicado también menciona que ha recibido numerosos mensajes de cercanía y afecto, a lo que el Papa ha expresado su gratitud, pidiendo a todos que continúen rezando por su bienestar.
El Papa Francisco fue hospitalizado en el hospital Agostino Gemelli debido a una bronquitis que lo ha afectado durante varios días. La noticia fue confirmada por el Vaticano, que informó que el Sumo Pontífice se someterá a una serie de exámenes diagnósticos y continuará con su tratamiento.
El estado de salud del Papa ha sido motivo de creciente preocupación en los últimos meses. De hecho, el pasado miércoles, durante la audiencia general, Francisco se vio obligado a interrumpir la lectura de su catequesis debido a los efectos de la enfermedad.
Visiblemente afectado, expresó a los presentes: “Y ahora pido al sacerdote que continúe leyendo. Yo con mi bronquitis no puedo ahora. Espero poder la próxima vez”. Con estas palabras, cedió el texto a don Pierluigi Giroli, miembro de la Secretaría de Estado.
La situación ya había sido crítica el domingo anterior, cuando tuvo que detener su homilía en la misa del Jubileo de las Fuerzas Armadas en la Plaza de San Pedro, debido a dificultades respiratorias. En esa ocasión, el Papa también delegó la lectura y se disculpó ante los asistentes: “Ahora me disculpo y pido al maestro que continúe la lectura por dificultad en la respiración”.
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