Delincuentes acabaron con su vida de siete disparos. Su padre, quien llegó a la escena del crimen, no cree en la hipótesis del intento de robo.
El hijo de un empresario de taxis fue asesinado de siete balazos por tres delincuentes que se hicieron pasar por pasajeros. El hecho ocurrió en una zona desolada del distrito de José Leonardo Ortiz, en Chiclayo.
La hipótesis que por el momento maneja la policía es que este joven de 25 años, identificado como Brian Heredia Colchado, fue asesinado por resistirse al robo de su vehículo. Él recibió los primeros disparos dentro de su vehículo. Ya herido, decidió huir y los delincuentes, que ya se encontraban en la parte exterior del carro, decidieron ultimarlo.
«Esta persona que ha fallecido no tiene ningún tipo de antecedentes. Podría ser un ajuste de cuentas, pero conforme pasen las horas y los días vamos a determinar cuál ha sido el móvil del crimen», señaló el jefe de la II Macroregión Policial, Marlon Anticona.
La hipótesis del robo no es del todo consistente al tener en cuenta que los delincuentes solo se llevaron el celular de la víctima.
Brian Heredia se dedicaba al servicio de taxi y era el principal soporte de su padre en su negocio familiar. Su papá, precisamente, llegó a la escena del crimen, donde fue consolado por un efectivo policial. Precisamente, él apuntó que a su hijo no le robaron el taxi que conducía ni otras pertenencias.
«El celular se lo llevaron, lo único que no hay es su celular. ¿Y su billetera? Sus demás cosas sí están, nada se han llevado», aseveró Santos Heredia, el padre de víctima.
El cuerpo del joven asesinado a balazos permanece en la Morgue Central de Chiclayo. Según información policial, es la víctima número 40 de los distintos homicidios cometidos en la norteña ciudad en lo que va del año.
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