Migraciones agiliza el control migratorio con puertas electrónicas en el nuevo Jorge Chávez
Desde el 1 de junio, Migraciones Perú pondrá en funcionamiento puertas electrónicas (e-gates) en el nuevo Aeropuerto Internacional Jorge Chávez. Estas permitirán realizar el control migratorio de forma automática y en menos de 20 segundos, según informó el jefe zonal de Migraciones Callao, Paulo Ostolaza.
Esta medida forma parte del proceso de implementación progresiva durante la marcha blanca del nuevo aeropuerto, que busca ofrecer un proceso de ingreso y salida del país más ágil y seguro.
¿QUIÉNES PODRÁN USAR LAS E-GATES?
El sistema estará disponible para:
- Peruanos mayores de edad.
- Extranjeros residentes mayores de edad.
- Portadores de pasaporte electrónico vigente.
Antes de llegar a las puertas electrónicas, los usuarios deberán realizar un prerregistro obligatorio en la plataforma Migracheck, disponible en la web de Migraciones o en kioscos del aeropuerto.
“El preregistro puede hacerse en la web, en el aplicativo móvil o en los kioscos del aeropuerto. Debe completarse dentro de las 48 horas previas al vuelo”, explicó Ostolaza.
Los pasajeros deben acercarse a la puerta electrónica con su pasaporte electrónico y tarjeta de embarque (física o digital). El sistema escanea ambos documentos y valida la identidad del usuario mediante reconocimiento facial.
“El sistema también verifica alertas internacionales, requisitorias y listas de Interpol o Alianza del Pacífico”, detalló el vocero de Migraciones.
ATENCIÓN PRESENCIAL Y EMISIÓN DE PASAPORTES
En paralelo al sistema automatizado, el nuevo aeropuerto contará con:
- 21 módulos de atención migratoria en llegadas.
- 33 módulos en salidas, atendidos por inspectores migratorios.
Migraciones recordó que el nuevo aeropuerto aún no cuenta con oficina de emisión de pasaportes electrónicos. Los pasajeros que requieran un pasaporte de emergencia deben acudir al terminal antiguo hasta ocho horas antes de su vuelo.
La instalación de una oficina de pasaportes en el nuevo terminal está prevista para una segunda fase, que iniciaría a fines de 2025 o inicios de 2026.