Seguridad Ciudadana, en coordinación con la Municipalidad de Chorrillos retiraron a los bañistas que se encontraban en la playa desde el 19 de enero a la 1 de la tarde.
Pese a las advertencias del personal de serenazgo y los carteles que señalan que estos balnearios aún no están habilitados, algunas personas hacen caso omiso e ingresan al mar.
Fernando Velasco, flamante burgomaestre de Chorrillos, informó que solo el último domingo se incautó más de 5,500 botellas de bebidas alcohólicas a los veraneantes.
Luis Molina sostuvo que solicitará cerrar hasta por dos meses las playas miraflorinas para evitar el contacto humano con las aves marinas que podrían transmitir la enfermedad.
Autoridades y especialistas piden evitar el contacto con estas especies y prevenir un posible brote de la enfermedad en humanos.
La entidad analizará tomar esta medida ante el aumento de casos de aves marinas muertas en playas del litoral peruano.
Respecto al consumo de carnes, se recomienda comprar pollos y pavos congelados. No obstante, la entidad estimó que la enfermedad bajará en los próximos días.
Vecinos y bañistas intentaron auxiliar al pequeño animal y alertaron a Serfor, quienes lo monitorearán y cuidarán hasta que regrese su madre.
Pese a que desde este lunes 31 de enero ya no habrá inmovilización social obligatoria, en varios establecimientos de la capital se vivieron escenarios similares a las épocas prepandemia.
Aves y especies marinas se encuentran muertas y muchas otras subsisten a duras penas.