Sada Goray recibió préstamo de S/ 1 millón de empresario español para pagar coima a Salatiel Marrufo

El ciudadano español Roberto Velasco Gómez ha sido mencionado por Sada Goray como uno de los personajes que le prestó dinero para pagar coimas a Salatiel Marrufo. La empresaria mencionó que el extranjero le entregó un millón de soles.

Goray precisó ante la Fiscalía que el 6 de diciembre de 2021, un día antes de entregarle S/ 1 millón a Salatiel Marrufo, Velasco le vendió un terreno de diez hectáreas adyacente al proyecto Lima Bonita, de Marka Group, en Chilca, a fin de hacer una planta de tratamiento de plantas residuales.

Ese mismo día, Velasco y Goray firmaron un acuerdo en donde se consignaba el préstamo y que la deuda se pagaría en un año. Cabe destacar que Velasco era dueño de un dojo de artes marciales en la región San Martín y pagaba un alquiler de hasta 1.500 soles por el uso de un local en Tarapoto.

Cuando fue citado a la Fiscalía, el español remitió un petitorio afirmando que no podía trasladarse a la capital por «el alto costo que le generaba». Añadió que no contaba con «disponibilidad económica» debido al préstamo impago de Goray por su situación judicial.

Sin embargo, para la Fiscalía, Velasco Gómez no acreditó el real contexto de la procedencia del dinero y calificó su declaración como «imprecisa y ambigua». Además, tampoco se ubicó en Chilca algún registro de predios a su nombre, ni tampoco se encuentra registrado como contribuyente.

VÍCTOR CHONG, EL NEXO ENTRE SADA GORAY Y ROBERTO VELASCO

Posteriormente, Velasco sí llegó a declarar al Ministerio Público, revelando que la conexión entre él y la empresaria la realizó su tío, Víctor Chong. El fallecido tío de Goray le vendió un terreno en San Bartolo por más de tres millones de dólares que se pagaron en partes.

Asimismo, el 15 de septiembre de 2021, Chong y Goray firmaron un acuerdo donde el primero le presta a la empresaria parte del dinero de esta transacción, 72 mil dólares y 800 mil soles. No obstante, la Fiscalía encontró que Chong tenía un pésimo historial crediticio hasta un año antes de morir.