Director ejecutivo de Qali Warma renuncia tras denuncias de Punto Final

Pedro Ripalda presentó su carta de renuncia a la Dirección Ejecutiva del programa Qali Warma, que depende del Ministerio de Desarrollo e Inclusión Social (MIDIS), tras las denuncias hechas por la Unidad de Investigación de Latina Noticias que reveló que se distribuían conservas de alimentos en mal estado de la empresa Frigoinca en distintos colegios del interior del país.

A través de su cuenta personal de X (antes Twitter), el funcionario publicó la misiva dirigida al ministro Julio Demartini para comunicarle su dimisión. «Como servidor público, con vocación y orgullo de trabajar por mi país, no puedo permitir que se utilice mi cargo como un instrumento para cuestionar o perjudicar la noble labor que realiza este programa tan esencial para la niñez peruana», se lee en el documento.

Además, Ripalda manifestó que en Qali Warma se «requiere continuar con el cambio de enfoque y replanteamiento del modelo que se ha venido implementando y que no debe interrumpirse por ningún tipo de interés que no sea el de garantizar el derecho de los niños y niñas escolares del Perú a recibir un servicio de alimentación de calidad».

«Está claro que el descubrimiento de una empresa inescrupulosa y corrupta que vulneró los procesos de las autoridades sanitarias regional y nacional así como las del programa no debe tolerarse nunca más», anotó.

DENUNCIA DE PUNTO FINAL SOBRE ALIMENTOS REPARTIDOS POR EL PROGRAMA QALI WARMA

El Memorando Múltiple 754-2024 del programa Qali Warma, al que tuvo acceso la Unidad de Investigación de Latina Noticias, señala categóricamente que los enlatados de pollo de la empresa FrigoInca, inmovilizados en el colegio Gamaliel Churata de Puno, no son «aptos para el consumo humano».

Se trata de un documento con los resultados de una evaluación microbiológica que realizó Digesa luego de que en Punto Final se revelara que la compañía fabricante sobornó a los funcionarios encargados de supervisar la calidad de las conservas cárnicas que, según los padres de familia, habrían producido la intoxicación de casi una veintena de estudiantes.

El informe analizó los enlatados ‘Don Simón’ que fueron repartidos por Qali Warma y que quedaron inmovilizados en el colegio de Puno desde marzo de este año. La conserva resultó «no estéril comercialmente, por lo cual no es apto para el consumo humano». Es decir, se concluyó que no existe garantía de que ese alimento esté libre de microorganismos como bacterias, virus, hongos, entre otros, representando un peligro para la salud de los escolares.

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