Caminar, sí, eso que hacemos todos los días, puede ayudarnos a tener una mejor salud. Sigue nuestras sugerencias para hacerlo de la mejor manera.
La ansiedad es un trastorno mental muy común que afecta a millones de personas en el mundo, aunque pocos hablen del tema. Se caracteriza por una preocupación excesiva y persistente que dificulta el funcionamiento normal de la persona. La ansiedad puede tener diversas causas, como el estrés, los problemas personales, las enfermedades o los cambios vitales.
TE VA A SERVIR: Hacer esto antes de ir a dormir podría quitarte años de vida
La ansiedad puede afectar especialmente a las personas mayores, que pueden sentirse más vulnerables, solas o aisladas. Además, la ansiedad puede aumentar el riesgo de padecer otras enfermedades, como la depresión, la diabetes o las enfermedades cardiovasculares.
Sin embargo, hay una forma sencilla y efectiva de prevenir y tratar la ansiedad: caminar. Así lo demuestra un estudio realizado por la Universidad de Limerick, en Irlanda, que ha analizado la relación entre la actividad física y el trastorno de ansiedad generalizada (TAG) en personas mayores.
El estudio, que ha utilizado los datos del Estudio Longitudinal Irlandés sobre el Envejecimiento (Tilda), ha encontrado que las personas mayores que realizan al menos 50 minutos de actividad física moderada, como caminar a paso ligero, por semana tienen un 47% menos de probabilidades de tener TAG que las personas inactivas.
El TAG es una forma de ansiedad que se caracteriza por una preocupación constante e irracional por diferentes aspectos de la vida, como la salud, el dinero, el trabajo o la familia. Esta preocupación interfiere con la capacidad de la persona para relajarse, concentrarse o dormir bien.
El estudio también ha encontrado que incluso niveles más bajos de actividad física, equivalentes a 10 minutos al día durante cinco días a la semana, pueden reducir el riesgo de TAG a lo largo del tiempo entre las personas mayores.
El psicólogo del ejercicio, el doctor Matthew Herring, director del estudio, ha explicado que la actividad física tiene múltiples beneficios para la salud mental de las personas mayores, ya que mejora el estado de ánimo, reduce el estrés, aumenta la autoestima, favorece el sueño y estimula la memoria.
Además, ha señalado que la actividad física puede ser una forma de socializar, de salir de casa, de disfrutar de la naturaleza y de sentirse útil y activo. Todo ello contribuye a mejorar la calidad de vida y el bienestar de las personas mayores.
El doctor Herring ha recomendado a las organizaciones de salud pública y a los profesionales sanitarios que promuevan estrategias basadas en la evidencia para fomentar la actividad física entre las personas mayores, especialmente entre las que están inactivas, para prevenir y tratar la ansiedad.
Así que ya sabes, si quieres cuidar tu salud mental y sentirte mejor, no hay nada como dar un buen paseo. Aquí te dejamos algunos consejos para que lo hagas de forma segura y eficaz:
Recuerda que caminar es una de las mejores terapias para la ansiedad y que nunca es tarde para empezar. Así que ponte en marcha y disfruta de los beneficios de este hábito saludable.
Te puede interesar:
También te puede interesar