El paro de transportistas en Lima y Callao ha generado pocos compradores y un bajo número de puestos abiertos en los mercados, ya que el transporte de productos y la llegada de clientes se ven gravemente afectados.
Este martes 4 de noviembre, transportistas de Lima y Callao acataron un paro para exigir mayor seguridad frente a los constantes ataques que vienen recibiendo por parte de extorsionadores. En medio de la protesta, algunos manifestantes obligaron a pasajeros a bajar de los vehículos que no se sumaron a la medida.
En Carabayllo, transportistas y manifestantes obligaron a descender a pasajeros de un bus de la línea A de Urano Tours S.A. en el kilómetro 20 de la avenida Túpac Amaru durante el paro de transportistas. El conductor se detuvo ante la presión y los manifestantes incluso intentaron desinflar una llanta con alicates, generando temor entre los pasajeros y caos en la vía.
En el kilómetro 24 de la avenida Túpac Amaru, en Carabayllo, un grupo de transportistas bloqueó la vía durante el paro de transportistas, quemando llantas para protestar por la situación del sector. La Policía acudió al lugar para apagar el fuego y restablecer el tránsito. Los manifestantes aseguran que están "cansados de lo que ocurre" en el transporte urbano.
En la noche del lunes 3 de noviembre, una unidad de la empresa ETUL4SA, que cubre la ruta San Juan de Lurigancho – Chorrillos (línea E), fue atacada en la cuadra 3 de la avenida Guardia Civil, en la urbanización La Campiña, Chorrillos, horas antes del paro de transportistas programado para este martes 4 de noviembre.