El ministro del Interior, Vicente Tiburcio, dio su balance de la jornada de protestas ocurrida en el Centro de Lima. Allí mencionó que en total diez personas fueron detenidas. Asimismo, se dirigió a la denominada 'Generación Z' y acusó a los estudiantes de la Universidad San Marcos como "los más violentistas" durante las manifestaciones de este miércoles.
Los gremios de transportistas, que vienen realizando una jornada de protesta de 24 horas, anunciaron que el paro continuará mañana martes 7 de octubre, es decir, la medida se extenderá por 48 horas. El anuncio fue hecho en conferencia de prensa por Martín Ojeda, director de la Cámara Internacional de Transporte. Él mencionó que la medida se tomó ante la imposibilidad de reunirse con la presidenta Dina Boluarte o con el presidente del Consejo de Ministros, Eduardo Arana, con el objetivo de hallar una salida a la crisis de seguridad que vienen padeciendo choferes, cobradores y pasajeros de los buses de servicio público. No obstante, dijo que tienen la esperanza de que esa reunión pueda concretarse en lo que resta del día.
Las avenidas del norte de Lima amanecieron cargadas de bloqueos, tensión y protestas. En vías clave, los buses permanecían detenidos, formando filas interminables en los alrededores del Óvalo Hábich, en San Martín de Porres. Los representantes de diversas empresas de transporte se agruparon en los puntos de bloqueo para hacer escuchar su pedido: ser recibidos directamente por la presidenta Dina Boluarte o el presidente del Consejo de Ministros, Eduardo Arana. Ninguna otra autoridad —ni ministros ni congresistas—, afirmaron, será interlocutor válido. "Vamos a seguir hasta que nos atiendan", aseguraron.
Natalie Vargas, vocera del área médica de la Generación Z, habló en el programa 'Buenas nuevas, malas nuevas' sobre los recientes ataques violentos contra los jóvenes. Ella afirma que tuvieron que atender a heridos con más de siete perdigones en la pierna.
El teniente alcalde de Lima, Renzo Reggiardo, se pronunció sobre las recientes manifestaciones en los alrededores del Centro Histórico de Lima. Precisó que los daños en materia económica ascienden a 2 millones de soles según estimaciones en comercio y turismo. Asimismo, advirtió de la presencia de "infiltrados" en las marchas, quienes las convirtieron en una situación violenta, cuestionando el verdadero objetivo de la 'Generación Z'.